Molotes de milanesa, la original creación cholulteca

Molotes de Cholula. Fotos de Rosa Villela y Folka México

No importa el día que pases va a estar lleno, las mesas ocupadas y gente alrededor de la entrada esperando su turno. Son los Molotes Katy, ubicados en San Andrés Cholula, los cuales se han popularizado por sus originales molotes de milanesa. 

Si los molotes poblanos son deliciosos, ahora imagínate esta combinación de quesillo derretido con fajitas de milanesa de cerdo envueltos en masa crujiente. 

La amplia oferta de este local incluye molotes de salchicha, longaniza, picadillo, pollo, jamón, chicharrón y hawaiano, así como los básicos de tinga, queso, requesón, champiñones y papa; además de tostadas, tortas preparadas y cemitas poblanas tradicionales. 

Todos los molotes tienen un precio de $ 45.00 pesos y si quieres algún ingrediente extra tiene un costo adicional de 5 pesos cada uno.

El plus es que aquí encuentras combo completo pues hay hasta elotes y esquites, no tienes que andar buscando un carrito en otra parte. 

Los famosos molotes de Cholula se encuentran en la calle 12 oriente, número 211, en San Andrés Cholula, atrás de Container City. Están abiertos de lunes a sábado desde las 3:00 hasta las 11:00 pm. 

En la aplicación Google Maps tienen una calificación de 4.6 estrellas, debido al buen sabor de sus alimentos, así como la atención del personal. 

Molotes poblanos: origen

Los molotes poblanos son un antojito típico de esta región. Se trata de una fritura sumergida en manteca de cerdo o aceite vegetal hecha a base de masa de maíz rellena con algún guisado o varios ingrediente. 

Desde su origen prehispánico se ocupaban elementos como los hongos, la flor de calabaza y chiles para rellenarlos. 

Existen versiones de que los auténticos molotes poblanos nacieron en el municipio de Xicotepec de Juárez, que es uno de los 12 pueblos mágicos del estado. 

Con el tiempo se fueron extendiendo a otras partes y fueron evolucionando hasta lo que hoy conocemos. 

*Este texto pertenece a Tendencias Puebla