Inundaciones en la zona del río San Francisco. Foto: EsImagen
El río San Francisco tiene una gran importancia en la historia de Puebla, pues jugó un papel preponderante durante la fundación de la ciudad.
Las torrenciales lluvias registradas en los últimos días y las anegaciones en la zona del Bulevar Héroes del 5 de mayo traen invariablemente el recuerdo de que ahí pasaba un río que fue entubado y que muy probablemente hoy está reclamando lo que le pertenece.
¿Cuándo se entubó el río San Francisco?
Fue el 15 de agosto de 1963 que, en una ceremonia oficial encabezada por el entonces alcalde Carlos Vergara y el gobernador Antonio Nava, dio inicio la obra de entubamiento del Río San Francisco.
De acuerdo con un estudio elaborado por Rubens Oliveira Santos para la revista Historia Mexicana del Colegio de México (Colmex), las autoridades de ese entonces tenían la intención de “dar solución a uno de los problemas de la ciudad”.
Es decir que el río era visto como un impedimento para el crecimiento económico y urbanístico del municipio.
No obstante, la acción de entubar el río para alcanzar el progreso y la modernidad hoy es altamente cuestionable.
¿Cuánto medía el río San Francisco?
Especialistas señalan que el río San Francisco tenía una extensión superior a 7 kilómetros, desde las barrancas denominadas Actipac y Xalpatlac hasta desembocar en el río Atoyac. Su cuenca estaba calculada en unos 73 kilómetros cuadrados.
Sus aguas abastecían a la Puebla antigua, tanto para labores de riego de cultivos como para tareas de higiene y hasta como energía para el funcionamiento de molinos.
Era tal su relevancia que gracias a la erosión, los primeros pobladores de los barrios fundacionales ocuparon arena o piedras obtenidas de San Francisco para la edificación de sus viviendas.
¿Por qué entubaron el río San Francisco?
El mismo estudio de Oliveira señala que el río no representaba un obstáculo para el tránsito de personas o vehículos pero de mayo a octubre, en la temporada de lluvias, su crecimiento generaba alarma.
Con el paso de los años y al formar parte de la cotidianidad urbana, el río San Francisco -lamentablemente- fue ocupado como vertedero de residuos. Siempre, en la época de lluvias, terminaba desbordándose y propagando contaminación, así que ese fue uno de los principales argumentos para su entubamiento.
Durante varias décadas el río estuvo en medio de polémicas e intereses políticos y antes de ser entubado hubo intentos fallidos de saneamiento. Pero en 1939 ocurrió una inundación extraordinaria que llevó a la creación del Comité pro Obras de Desviación y Saneamiento que buscaba convertirlo en bulevar.
La zozobra de que el río se desbordara y destruyera la ciudad permeó y se mantuvo como una idea generalizada y recurrente entre la población de la época, al punto de que parecían repudiarlo.
Tras años de conflictos y una severa crisis económica fue hasta 1963 que los gobernantes en turno apostaron todo para entubar el río y ganar así la confianza de ciertas clases.
Imagen: Colmex